Volumen Nº9: "Desamor"

Me siento rara... vacía, es como si hubiera perdido algo que ni siquiera sabía que tenía. 

Últimamente tengo noches de insomnio, me despierto muy temprano a la madrugada y no me puedo dormir, porque me quedo pensando, analizando y a veces hasta tratando de predecir lo que podría llegar a pasar. 

Me siento incompleta... perdida, de alguna forma estoy perdiendo la seguridad que pensé que tenía. 

Porque me encuentro a mí misma divagando en la incertidumbre de no saber qué pasa ni el porqué.

Hay muchas cosas que no entiendo, que no termino de comprender, y aunque ponga todo de mí y haga el mayor esfuerzo por tratar de cambiarlo, se complica cuando vos solo estás remando contra la corriente que te arrastra al vacío inconmensurable del desamor.

¿Será que es eso? ¿Desamor? ¿Será por eso que mis noches se convirtieron en la crónica más agónica?. 

Porque tengo miedo de perder algo que para mí es preciado, pero más miedo me da ser la única que se preocupa al respecto. 

Se supone que es de a dos, pero últimamente siento que soy sólo yo. Aferrada a la idea de algo que ya no sé si existe, al recuerdo de lo que quisiera fuera el presente, a lo que me gustaría traer de vuelta pero que no puedo por más que lo intente. 

Reflexionando descubrí que llegué a mendigar amor, un poco de cariño o un mimo de vez en cuando y creo que más bajo que eso no se puede caer.

Desamor, he ahí la causa de todo. 

Ver como todo se va marchitando aunque los demás lo ignoren y sufrir en silencio por no poder evitarlo. 

Sería tan facil revertir todo, tan sencillo... devolverle la vida a lo que era nuestro está al alcance de la mano, si tan sólo me escucharas... pero no lo haces porque creo que ni siquiera me prestas atención.

No te diste cuenta de cambios importantes en mí, si te preguntara cuándo fue la última vez que te sonreí no sabrías la respuesta. Porque ni siquiera me miras. 

Estar al lado de alguien, físicamente en el mismo lugar y sin embargo sentir que están a kilómetros de distancia como si fueran desconocidos compartiendo una cama, cuando antes no existía distancia alguna ni siquiera la real, la cuantificable... es un golpe bajo, un dolor agudo porque te va rompiendo de a poquito desde dentro hacia fuera. 

¿Desamor? ¿Será eso lo que sentís por mí? ¿Será que llegamos al punto de no retorno? 

Daría hasta lo que no tengo por cambiar las noches de insomnio por esas en las que nos reíamos hasta quedarnos dormidos, en las que me acostaba en tu pecho y sentía que ahí, en ese momento y en ese lugar, era mi lugar en el mundo... mi lugar seguro porque vos estabas conmigo y no había cabida para nada ni nadie que me pudiera hacer mal. 

Me sentía grande y poderosa pero a la vez chiquita y frágil porque con un beso me desarmabas como si no existiera en mi fuerza alguna que pudiera resistirse a vos. 
Eso es lo que me quita el sueño, pensamientos de recuerdos lindos que desembocan en imaginarme lo peor porque siento que estoy viviendo un sueño.

Tengo noches de insomnio porque no puedo evitar pensar en qué haría sin vos.

¿Cómo sería mi vida si no te tuviera? ¿En qué momento te convertiste en alguien tan indispensable para mí? 

Si nunca dejé entrar a nadie por no querer volverme más vulnerable, pero vos saltaste todas mis defensas como si fueran una paredcita de medio metro de altura.

¿Tanto se puede amar a alguien? ¿Siempre fui capaz de amar así? ¿O es algo que solamente vos causas en mí? 

Es que te amo tanto, cada parte de tu ser, cada cosita que haces y que ni siquiera notas pero que son tan tuyas y que te hacen tan único... como la risita nasal que te sale cuando te tentas. 

No sé cómo explicar que hay veces que me cuelgo pensándote, siempre es de noche, porque es ahí cuando te extraño más y siempre son cosas como estas. 

Te amo tanto que me aterroriza la idea de que alguna vez caigamos en el desamor y espero que nunca te tenga que decir algo como lo que está al principio de esta entrada.